CÓMO TRABAJO

¿Sabías que un 70% de la mejoría en los procesos terapéuticos se debe al vínculo entre el terapeuta y la persona que viene a terapia? Por eso en mí tendrás un aliado en tu proceso de mejora personal. Haremos de las sesiones un espacio seguro y confidencial en el que puedas practicar el autocuidado y en el que encuentres recursos para resolver tus problemas. 

Las primeras sesiones tienen una doble finalidad: conocerte y que me conozcas. La evaluación es una parte esencial de cualquier terapia porque me permitirá poder adaptar mi forma de trabajar a tus necesidades. No te atenderé con el piloto automático, no eres un número. 

Eres una persona única y recibirás una atención también única, con espacio para plantear tus dudas, certezas, inquietudes y cuestiones que nos ayuden a conocernos mejor y a entender a fondo lo que es un proceso terapéutico y mi forma de abordarlo. 

A partir de ahí, planteamos objetivos de cara a la fase de intervención, orientada a que te conozcas mejor y aumentes tu seguridad y confianza. Esto te permitirá poner en marcha los cambios necesarios para sentirte mejor. Todo ello en sesiones de una hora de duración y una frecuencia semanal al inicio que espaciaremos a una frecuencia quincenal. 

Y una vez te sientas bien en el presente, dedicaremos algunas sesiones a orientar tu futuro para que puedas afrontarlo con herramientas prácticas para superar las dificultades que todos nos vamos encontrando. Será a partir de ahí cuando afrontemos el cierre de la terapia, que es la mejor señal de que las cosas han ido bien.